EL MILENIO por el Padre HENRY RAMIÉRE S.J.
Padre Henry Marie Felix Ramiére S.J. (1821- 1884)
El sacerdote jesuita francés Henry Ramiére es bien conocido por ser el fundador del Apostolado de la Oración, que fundó con el fin de propagar la devoción al Sagrado Corazón de Jesús y a su Realiza Divina comenzando en 1861 a publicar la revista "Le Messager du Cœur de Jésus - Bulletin mensuel de L´Apostolat de la Prière" que pronto rebasó las fronteras de Francia y comenzó a editarse en otros países europeos como España, Irlanda, Italia y Bélgica; para comienzos del siglo XX el Apostolado de la Oración había llegado ya a más de 50 países convirtiéndose en uno de los apostolados más grandes de la Iglesia Católica, hasta el punto que el Papa Pío IX aprobó definitivamente sus Constituciones y enriqueció a este Apostolado con muchas indulgencias, las cuales confirmarían los posteriores Pontífices. Tal era el ardor del Padre Ramiére de que la salvación llegara a innumerables almas por el Sagrado Corazón de Jesús que en 1875 envió una petición al Papa Pío IX, la cual firmaron 525 obispos de todo el mundo, para que fuera consagrada Roma y el mundo al Sagrado Corazón de Jesús; a pesar de ser bien acogida esta petición no se llevó a cabo y no se hizo en vida del Padre Ramiére, pero si lo haría el Papa León XIII en el año 1899.
Lo que muy pocos saben de este excepcional sacerdote es que su devoción al Sagrado Corazón de Jesús era de rasgos profundamente parusíacos y milenaristas, si bien en vida expresó esta bienaventurada esperanza (Tit. 2, 13) después de su muerte esta importantísima faceta fue ignorada. Ahora les traemos a nuestros lectores estas breves letras que el Padre Ramiére dedico al Milenio y al Reino de Jesucristo que tanto anhelaba:
"La empresa que llamamos El Reinado del Corazón de Jesús no está aún terminada, pero llegará a término y de nosotros depende el apresurar su realización con la generosidad de nuestro apoyo. La obra comenzada por los primeros apóstoles, de un modo tan glorioso, será completada por estos nuevos apóstoles cuya venida ha sido predicha por los santos ya desde hace siglos, y que serán a título especial los apóstoles del Corazón de Jesús (...) No temamos, pues, por el desenlace de la lucha, Aquél bajo cuyo estandarte combatimos, tiene por divisa El Invencible; sí, confiamos que llegará el momento, que no está lejos, en que la sociedad amaestrada por la experiencia e instruida, acaso también, por los azotes de Dios comprenderá que debe hallar en Jesucristo sus verdaderos adelantos, la paz y la dicha que ha, por tanto tiempo y siempre en vano, buscado fuera de Él... Entonces empezará la era del Corazón de Jesús".
PAX VOBIS.
Desconocemos al El sacerdote jesuita francés Henry Ramiére. Pero, si no tiene más textos de él, deducir de este párrafo, que fue milenarista o milenista, es llevar demasiado lejos, un texto que todos los católicos subcribirían, sin ser casi ninguno milenarista: doctrina condenada por la Iglesia, tanto en su versión carnal, como mitigada. el texto no se corresponde con el título, y en él no se puede apoyar la tesis milenarista, pues sería una interpretación forzada e interesada sobre un sacerdote que ya no se puede explicar.
ResponderEliminarEl mismo Sn Agustín que en la Ciudad de Dios condena el milenarismo subcribiría este texto del sacerdote Henry Ramiére, sin ser milenarista. Lo milenaristas que no tienen argumentos, son capaces de inventarlos, poniendo en la boca de santos sacerdotes de antaño palabras que nuna dijeron.
Dado que el milenarismo carnal y el mitigado están condenados por la Iglesia, no se pueden difundir, pues se comete pecado. Si ustedes defiende otro milenarismo más novedoso, se ha de someter al juicio de la Iglesia; hasta que eso sea posible, siempre será tachado como cualquiera de las dos modalidades condenadas. Y auqnue es verdad que San Juan habla en el Apocalipis de las dos resurrecciones, y de un reinado de mil años, los católicos no interpretamos la Biblia omo a cada le venga en gana, sino guíados por el magisterio de la Iglesia. La iGlesia ya ha hablado codenando las modalidades surgidas del milenarismo, Los doctores de la Iglesia también.
Estimado Máximo: Comienzo por responder a esta calumnia tan repetida como tan poco investigada: el Milenarismo carnal, de origen judaico, sí que está condenado por la Iglesia, de hecho es la actual postura del judaísmo: esperar a su "mesías" (el Anticristo) para esclavizar a todos los gentiles de la tierra. El Milenarismo mitigado, al cual suscribían grandes teólogos y exégetas bíblicos de la talla de San Agustín, NUNCA FUE CONDENADO POR LA IGLESIA, la tal "condena" que mencionas" es una restricción del Santo Oficio fechada del año 1944 en que restringe el estudio del Milenio, que es muy delicado y que a muchos en su afán ha llevado a decir cualquier herejía totalmente distinta de lo que en realidad estudia y habla el Milenarismo.
EliminarAhora bien, le recomendamos leer el post de nuevo, pues es totalmente inexacto su afirmación de que hemos imputado al Padre Ramiére el mote de "milenarista"... en ninguna parte lo hemos dicho; de hecho, los administradores de este blog no somos milenaristas pero eso no nos impide profesar el Milenio como una verdad de Fe contenida en las Sagradas Escrituras como usted bien menciona en la Profecía del Apocalipsis de San Juan Apóstol, pero además también está contenido el Milenio en las Profecías de Isaías, Jeremías, Zacarías, los Salmos, etc. así que del Milenio no hay nada inventado por mente de hombre se lo aseguro, todo ha salido de la boca de Dios.
Por otro lado este texto del Padre Ramiére deja entrever la esperanza de que sea instaurado el Reino del Sagrado Corazón de Jesús en la Tierra ( advéniat regnum tuum) pero ese Reino no vendrá a la Tierra hasta que el Misterio de Iniquidad sea vencido por Jesucristo Nuestro Señor en su Santa Parusía, ese Misterio de Iniquidad caerá junto con el Anticristo y después del Juicio de las Naciones aparecerá el Señor en los alto del Cielo instituyendo su Reino en la Nueva Jerusalén, restaurando a su pueblo y uniéndolo al seno de la Iglesia victoriosa... Todo esto implica el Reino del Sagrado Corazón de Jesús; además el padre Ramiére pone como característica de este reinado el fiel cumplimiento de la Ley Divina por parte de los hombres, cosa que de cierto no se lograra en este actual mundo cuyo príncipe es el demonio, pero que se logrará en el Reino Milenario de Cristo sobre la Tierra, sólo allí la humanidad (aquellos fieles que sobrevivieren al Gran Castigo) vivirán íntimanete unidos al Señor por el temor y el amor.